¿Qué es el Poder Judicial?
La SCJN es el máximo órgano en materia de administrar justicia, interpretar leyes, conocer y solventar conflictos; mientras que los Tribunales Colegiados de Circuito enfrentan amparos directos (medios de defensa contra sentencias); y los de Apelación se encargan de revisión de juicios de amparo –medio de defensa contra leyes o actos de autoridades que violan derechos humanos–, o de asuntos que se hayan conocido antes por juzgados de distrito.
Actualmente, el Poder Judicial de la Federación está compuesto principalmente por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) con sus 11 ministro; las magistrados y los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, las magistrados y los magistrados de los Tribunales de Circuito –Colegiados y Unitarios– y las y los jueces de Distrito. Una de las reformas del Plan C se enfoca en que estos cargos sean electos por voto popular.
Al corte de agosto de 2023 había 428 Juzgados de Distrito en toda la República, según el Consejo de la Judicatura Federal. Ellos son quienes pueden conocer de todos los asuntos o especializarse en materia penal, civil, mercantil o de amparo.
Hay 910 personas magistradas y 737 jueces actualmente en México, según el Censo Nacional de Impartición de Justicia 2023 del INEGI. La iniciativa, plan “C”, entonces renovaría 1,686 cargos del poder judicial federal, a partir de una selección de más de 10,000 candidaturas.
Si la reforma es aprobada cómo está, en 2025 votaremos por todos los cargos de jueces y magistrados, quienes estarán en su cargo hasta 2030. Entonces se tendrían elecciones nuevamente para reelegirse a un segundo período… siempre que la otra iniciativa de la virtual presidenta electa no impide la reelección para todos los cargos.
Para elegir de manera directa y secreta por la ciudadanía a las 9 personas ministras de la Suprema Corte, 5 del Tribunal de Disciplina Judicial, 910 personas magistradas de circuito, incluyendo a las que despachan en 258 tribunales ordinarios y 12 auxiliares, 737 personas juzgadoras de circuito y 25 magistraturas de todas las salas del TEPJF, se celebrarían comicios el primer domingo de junio como parte de las elecciones ordinarias.
La iniciativa de reforma dice que jueces y magistrados durarán 9 años en el encargo y podrán ser reelegidos para un segundo período. Esto implica que volveremos a renovar al poder judicial federal completo al mismo tiempo en 2039.
La iniciativa no ofrece información sobre cómo serían las campañas, sino que se relega para la ley secundaria, de la que no tenemos propuesta aún.
¿Cuáles son los riesgos de que los integrantes del Poder Judicial Federal sean elegidos por voto popular?
Politización de la Justicia
- Campañas Políticas: Los candidatos tendrían que hacer campaña para ser elegidos, lo que podría llevarlos a alinearse con partidos políticos y aceptar donaciones de campaña, comprometiendo su imparcialidad.
- Promesas Populistas: Los jueces podrían sentirse presionados a hacer promesas populistas para ganar votos, en lugar de centrarse en la justicia imparcial y basada en la ley.
Independencia Judicial Amenazada
- Presiones Políticas: Los jueces podrían ser influenciados por quienes los eligen, comprometiendo su capacidad para tomar decisiones imparciales y basadas únicamente en el análisis legal.
- Corto Plazo vs. Largo Plazo: La necesidad de ser reelegidos podría llevar a los jueces a tomar decisiones que busquen resultados favorables a corto plazo, en lugar de decisiones correctas desde un punto de vista legal que tomen en cuenta el bienestar a largo plazo.
Calidad y Competencia
- Criterios de Selección: La elección por voto popular podría priorizar la popularidad sobre la competencia jurídica, llevando a la elección de jueces menos calificados.
- Falta de Conocimiento del Electorado: Los votantes podrían carecer del conocimiento necesario para evaluar correctamente las cualificaciones y la experiencia de los candidatos judiciales.
Riesgos de Corrupción
- Financiamiento de Campañas: La necesidad de financiar campañas puede abrir la puerta a la corrupción, ya que los candidatos podrían sentirse obligados a devolver favores a sus patrocinadores.
- Intereses Particulares: Los jueces podrían ser influenciados por intereses económicos o políticos que financiaron sus campañas, en lugar de actuar en interés de la justicia.
Inestabilidad y Confianza Pública
- Decisiones Populares vs. Justas: La presión para tomar decisiones populares puede llevar a dictámenes que carecen de fundamento jurídico sólido, erosionando la calidad de la justicia.
- Pérdida de Confianza: La percepción de que los jueces son influenciables por intereses políticos podría disminuir la confianza pública en el sistema judicial.
Fragmentación del Sistema Judicial
- Variedad en Enfoques Jurídicos: Podría surgir una fragmentación en la aplicación de la ley, con jueces elegidos por diferentes regiones o facciones políticas aplicando criterios inconsistentes.
- Desigualdad en la Justicia: La disparidad en las filosofías judiciales y la falta de uniformidad pueden llevar a la desigualdad en la administración de justicia.
Rendimiento y Motivación
- Evaluación Superficial: Los jueces podrían ser evaluados superficialmente por sus decisiones más visibles en lugar de por su desempeño general y su adhesión al estado de derecho.
- Estrés y Presión: Los jueces enfrentan una presión adicional para ser populares en lugar de ser justos, lo que podría afectar negativamente su salud mental y su rendimiento.
Erosión de la Supremacía Constitucional
- Conflictos de Intereses: Los jueces podrían verse tentados a interpretar la constitución de manera que favorezca a sus electores o patrocinadores políticos, erosionando la supremacía constitucional.
- Modificación de la Ley: La necesidad de ser reelegidos podría llevar a los jueces a modificar leyes o interpretarlas de manera inconsistente con principios constitucionales para ganar apoyo popular.
Educación y Conciencia Jurídica del Electorado
- Desinformación: Los votantes podrían no tener el conocimiento adecuado para tomar decisiones informadas sobre cuál candidato judicial es el más competente.
- Influencia de Medios de Comunicación: La influencia de los medios de comunicación y la publicidad pueden desviar la atención de la competencia judicial hacia cuestiones superficiales o sensacionalistas.
La elección de los integrantes del Poder Judicial Federal por voto popular presenta una serie de riesgos significativos que podrían comprometer la independencia, imparcialidad y eficacia del sistema judicial. Los mecanismos actuales de selección, aunque imperfectos, suelen incluir filtros y evaluaciones rigurosas que aseguran un cierto nivel de competencia y neutralidad.
Para fortalecer la rendición de cuentas y la confianza en el sistema judicial sin recurrir a la elección popular, podrían considerarse alternativas como:
- Comisiones Independientes: Formar comisiones independientes para evaluar y seleccionar a los jueces basadas en méritos y competencias.
- Transparencia en los Procesos: Aumentar la transparencia en los procesos de selección y decisión judicial.
- Evaluaciones Periódicas: Implementar evaluaciones periódicas del desempeño judicial por parte de órganos competentes y estructurados para este fin.